La puerta de atrás: A Roma con amor. Fama y romanticismo en la ciudad de las ruinas (To Rome with Love, Woody Allen, 2012)

La cita anual con el cine de Woody Allen nos llega ahora desde Roma, con un plantel destacado de buenos actores y cuatro historias independientes desarrolladas todas en la ciudad del amor. Lejos de ser su obra maestra, sin embargo, es un paso más en la indagación de temas más o menos recurrentes en el cineasta que no deja de sorprendernos con su capacidad de creación.

Veremos así temas vinculados con el amor y con la fama, presente desde el inicio del film y que pulula como un espectro entre todos los personajes y sus tramas. Una pareja de recién casados que están un tanto despistados; un joven arquitecto que se enamora de la amiga de su novia por su atractivo carácter; un romano de a pie que se convierte en famoso de la noche a la mañana; y un director de ópera al borde de la jubilación que desea encontrar la manera de escapar de ella.

Historias, en apariencia, sin un hilo conductor, que, sin embargo, se ven unidas por un espacio singular como es Roma, que inspira el amor romántico y, a la vez, el deseo de gloria. Una gloria que la ciudad evoca convertida en ruinas, una fama que se convierte en efímera y de la que solo quedan los restos de lo que antes fue un grandioso imperio. Entre estos posos descansan los impulsos de estos personajes, siempre tan interesantes y con tantos matices en el cine de Woody Allen.

Destacable es, sin duda, la labor de los actores, siempre brillantes en sus films. Como es habitual, siempre es recomendable escucharlos en versión original, con sus detalles y peculiares expresiones. Penélope Cruz, ahora como prostituta, llena la pantalla con su desparpajo; Alec Baldwin, inmenso en su papel de "Pepito Grillo", que con una sola mirada te traslada sus reflexiones nostálgicas; Ellen Page, que interpreta a una neurótica actriz embaucadora dispuesta a derrumbar la sólida estructura de la vida del joven arquitecto (Jesse Eisenberg); y Roberto Benigni, con su popular comicidad, se convierte en famoso y su perplejidad y locura no deja de hacerte reír.

A Roma con amor puede parecer para el espectador un mosaico de historias románticas sin más intención que entretenerte un rato y pasar página. Sin embargo, lejos de eso, es una dulce película por fuera que esconde temas tristes y melancólicos por dentro. En consonancia con la ciudad, el film parece querer igualarse a ella, y convertirse en una muestra sobre el auge y la decadencia del ser humano, sobre el pasado y el futuro, sobre el antes y el después, sobre la gran obra humana y sus ruinas… No por casualidad utiliza la cámara para mostrar panorámicas circulares y reforzar así la idea de conjunto completo, a modo de Coliseo o circo romano. De esta manera, Allen está cerrando su periplo europeo para regresar a Nueva York a rodar la siguiente película.

Un buen ejemplo de todo ello lo encontraremos en el papel del propio Woody Allen que interpreta esta vez al director de ópera enganchado a su trabajo. Él no quiere jubilarse porque considera que ese sería el primer paso a la muerte. Además, su obra se ha visto marcada por la incomprensión, lo que da lugar a encontrar el paralelismo con la propia obra fílmica de Allen. Él también ha sido un director incomprendido y “adelantado a su tiempo” que ha recibido duras críticas. Sin embargo, el público lo ha acompañado y los actores se han lucido con él. Observad el diálogo que tiene con su mujer cuando llegan a Roma y buscad el vínculo con el director; entenderéis que su vida es el cine y que sólo dejará de serlo cuando muera.

Película de transición de Allen, a la que le falta rotundidad pero que se ve sin sobresaltos y con temas nuevos, como el de la jubilación aplicada al propio director. Un guiño a su futuro que, aunque pareciera inevitable, podría llegar algún día. Esperemos que quede lejos ese momento y que siga tan despierto como siempre, porque nadie ha sido capaz de diseccionar la sociedad contemporánea con tanta clase como él, reírse de todos y de sí mismo, y ganarse al público año tras año. Entretenida y melancólica, como un caramelo de café espresso…

Aquí tenéis el trailer de la película en español. Os añado también un link al trailer en versión original con subtítulos en español y el enlace a la página oficial del film.